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Victorenses apoyan reelección de Lalo Gattás

Ma. Teresa Medina Marroquín.-

El registro del alcalde Eduardo Gattás Báez para participar en el proceso interno de Morena a fin de continuar sirviendo un trienio más a Ciudad Victoria, lleva en sí mismo una gran ventaja contra sus competidores.

Competidores de afuera y de adentro, y que, aclarando, no por ser compañeros del mismo partido (algunos de los adversarios) acepten sus desventajas sin darle la pelea al edil mayor de la ciudad.

La primera reflexión de este comentario apunta a que los victorenses han hecho la comparación entre el pasado y el presente.

Esto es, entre el PRIAN y Morena. Un balance obligado por el hartazgo, sin atender colores o ideologías, sino a lo que se merecen.

Indicativo de que “Por sus frutos los conoceréis”, revela el Libro Sagrado. Y eso se refiere a ese pasado y al presente.

Un presente que se traduce en que los resultados presentados por el Gobierno Municipal  de Gattás son evidentes, palpables y de gran utilidad.

Hechos y soluciones que han ido mucho más allá de las promesas que todas y todos saben se hicieron en el pasado prianista, dejando una secuela grave de malversaciones, decepciones y una ciudad capital abandonada a su suerte.

¿Pero que todavía hay una gran cantidad de trabajo y muchos proyectos por llevar a cabo?, es absolutamente cierto. Nadie lo niega.

Sin embargo, eso no significa que la sociedad victorense no le apueste a que los tiempos políticos y los aires oxigenados del 2024, sean otros tres años cargados de mayores cambios y de progreso para una ciudad que había caído en una ausencia de rectitud pública.

RÉCORD HISTÓRICO EN PAVIMENTACIÓN Y LA SEGUNDA LÍNEA DEL ACUEDUCTO

Quienquiera que vaya enfrentar a Lalo Gattás en la arena electoral sabe que no la tiene sencilla para nada.

Y que se verá de frente a un balance positivo de resultados pocas veces visto en el pasado, incluso beneficios inéditos como es que Victoria tiene una nueva fisonomía urbana en diversos aspectos, de la cual Gattás siempre manifestó, desde el principio de su administración, una fuerte preocupación a fin de embellecerla.

Eso genera, sin duda, a la hora de votar no sólo una lógica política, sino también una mayoría social que reconocerá, por ejemplo, que la Capital de Tamaulipas tiene en este gobierno municipal un récord histórico en pavimentación.

Estamos hablando de obras de vialidad que ya superaron 250,000 metros cuadrados de nuevas carpetas asfálticas, con una inversión conjunta Estado y Municipio de Mil Millones de pesos.

¿Más resultados concretos y tangibles?

Pues que la Segunda Línea del Acueducto Guadalupe Victoria iniciará en 2024 con una inversión de 700 millones de pesos. Un proyecto al que tanto el alcalde Eduardo Gattás Báez y el gobernador Américo Villarreal Anaya le metieron mucha fe.

Primero fe de la buena, es decir, en Dios Todopoderoso, para luego, sin que por esto todo vaya a percibirse un tanto cuanto religioso el tema, dar la batalla argumental en la Ciudad de México, ante la Secretaría de Hacienda y la Comisión Nacional del Agua, y desde luego frente a la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados.

Aunque la petición mayor fue la que se le planteó al presidente Andrés Manuel López Obrador.

Y con el reconocimiento con el que el Titular del Ejecutivo Federal vio la imperiosa necesidad de un pueblo, que durante muchos años ha estado sometido a la tremenda incertidumbre provocada por una crisis hídrica que urge sea resuelta. Un asunto de sobrevivencia.

Afirma Gattás que esta segunda línea del acueducto debió haberse hecho desde hace diez años, pero no se hizo porque los gobernadores y los alcaldes de entonces no voltearon a verla, excepto sus intereses personales.